2.  Organízate.
El pequeño esfuerzo que debas hacer para organizarte te reportará grandes beneficios: más tiempo, menos estrés y mejores notas. Imagínate que entras en una tienda a comprar un artículo y encuentras que la mercancía se halla dispersa por todas partes, sin ningún tipo de orden. ¿Cuánto tiempo te tomaría hallar lo que buscas? ¿No sería más fácil si todo estuviera clasificado y organizado en las estanterías, y los pasillos estuvieran claramente identificados? Este mismo principio puede aplicarse a tus estudios. ¿Cómo?
·  Hazte un horario. Se cuenta que un muchacho una vez pasó todo el fin de semana en casa de un amigo y se olvidó de las tareas que le correspondían. El lunes le tocó rogarles a los profesores que le dejaran presentar los trabajos escolares después. Él ahora hace una lista de cosas pendientes para recordar lo que tiene que hacer.
También cuenta una muchacha que le fue útil anotar las cosas. Recuerda que tenía una agenda con todas sus actividades: las tareas, los exámenes, estudio y demás compromisos escolares. Eso le ayudaba a ordenar las prioridades y a entregar los trabajos a tiempo.
Sugerencia: lleva una lista de cosas por hacer y organiza un horario de estudios.
·  No lo dejes para después. Es fácil decir: “Lo haré más tarde”. Pero es mejor no posponer las cosas, sobre todo los deberes escolares.
Sugerencia: Ponte a hacer la tarea lo más rápido posible, antes de encender la televisión o dedicarte a otra actividad recreativa.
·  Organiza tus útiles escolares. ¿Te ha pasado que llegaste a clase y allí te diste cuenta de que habías dejado en casa el cuaderno, el libro, incluso el lapicero? ¡Qué fastidio! ¿Cómo evitar que eso te suceda?
Sugerencia: Mantén ordenada tu mochila para que encuentres las cosas más fácilmente.
Conclusión: si te organizas, te ahorrarás el estrés de olvidar las cosas, llegar tarde y sentir que nunca te alcanza el tiempo para atender otros asuntos más importantes. ¿Por qué no comienzas desde ahora? Piensa en un aspecto de tu vida en el que necesites organizarte. Luego, pídeles a tus padres o a un amigo que te den ideas para mejorar.